La desobediencia mesiánica

Querido pueblo de Puerto Rico,

Os doy un mandamiento nuevo: No pagareís el impuesto de Aníbal.
Sí, mis queridos fieles, esto es lo que les invito. Ya sé que técnicamente Yo y algunos otros senadores acabamos firmando este nuevo impuesto. Pero eso fue un engaño, parte de la inmensa corrupción de Aníbal y sus seguidores. Nosotros nunca quisimos quitarle dinero a ustedes...al menos no con los impuestos. No estaba en mi Obra Divina. Así que Yo por primero me niego a pagar este impuesto.
Si los enemigos nos imponen quitarnos este dinero, Nosotros nos negaremos a pagarles. Es la nueva desobediencia civil. No podemos permitir tales injusticias. Además, ya saben que al Mesías no le gusta devolverle el dinero al estado. El dinero del Mesías es del Mesías y se quedará por siempre en su Glorioso bolsillo. Así que, mi querido pueblo, juntemos nuestras fuerzas para que se cumpla Mi voluntad y no la de Aníbal. Si no, siempre podría lograr que se paralice de nuevo la economía y el gobierno de Puerto Rico. ¿Es esto lo que quieren? Estoy seguro que no. Así que sigan mi Mandato o se las van a ver negras. El Mesías siempre consigue lo que quiere. Estamos en un momento difícil pero pronto vendrán días de Oro y Verde para el Mesías y todos aquellos que me siguen, pero especialmente para Mí porque Yo no puedo compartir mi Gloria.
Perseveramos, luchamos y triunfaremos. Porque yo soy el más lindo y siempre me salgo con las mías...aunque la cárcel se llene cada vez más de mis ex-funcionarios. Son víctimas, mártires del bien, de esta Guerra Divina a la que Yo saldré Resucitado, limpio y más hermoso que nunca.

Así que les digo como Calle 13, que son mis adorados amigos de Guaynabo City: Atrévete-te-te!! Y no pagues el impuesto, damn it!
Aguarden mi Palabra.
Amén!